Hace unos días celebramos la Primera Comunión de nuestro hijo mayor.
Fue un día precioso, increíble, emocionante y muy casero, como Santi quería.
Él eligió todo, era su día, y quiso poner su toque en todo.
El menú quiso que lo hiciéramos nosotros, en casa, él ayudó con sus hermanos y todo fue elegido por él.
Muchos aperitivos, platitos de cóctail y albóndigas con arroz, era Su Menú.
Pensó en todo, lo que le gustaba a él, pero sobre todo, lo que le gustaba a sus hermanos.
Os enseñamos las mesas saladas y os damos ideas para alguna ocasión.
Croquetas redonditas de jamón.
Croquetas redonditas de gambas.
Quiche de baicon.
Quiche de cebolla caramelizada.
Ensalada de col.
Ensalada de cangrejo.
Vasitos de gazpacho.
(Pablo y Pepe decían que era "zumo de Comunión").
Tablas de jamón serrano con piquitos.
Tablas de quesos variados con uvas y nueces.
Nachos con guacamole.
Panes de todas las clases (pensó en todos sus hermanos).
Platos, servilletas, cubiertos, todo como él quería.
Las mesas saladas quedaron exquisitas, una comida increíble, pensada para todos y Santi acertó con todo.
Comimos demasiado, y lo celebramos a lo grande.
