Brihuega (Guadalajara)

- Mamá y papá, ¿existen los campos amarillos?
-Sí, los de trigo cuando se está secando, por ejemplo.
- ¿Y rojos?
- Sí, de amapolas.
-¿Y morados?
- Pues sí, pero no sé donde...


Nos pusimos a indagar y buscar campos morados.
Y descubrimos que en la Provenza, en Francia,
y en la Toscana, en Italia, hay unos campos preciosos.

Pero también descubrimos que cerquita de la capital española,
a 90 km. aprox, tenemos unos campos morados increíbles.
Así, que en busca de ellos nos fuimos.

Llegar a un pueblo, y ver que todo está decorado con telas moradas,
con ramitas y aroma a lavanda, nos sentimos felices.

Los niños alucinaron, no pensamos que nos íbamos a encontrar
estos detalles en busca de nuestros campos morados.

Calles llenas de cajas con plantas por todos los rincones.

Nos encantó cada detalle, el acogimiento de la gente.

Un pueblo pequeño, lleno de iglesias y con gente grande.
Así es Brihuega, en Guadalajara.

Y como no puedo dejar de enseñaros detallitos de diseño,
interiorismo y lo que me gusta... mirad qué casa...

Estuvimos muy a gustito y volveremos.
Ha sido un descubrimiento muy grato.

¡¡Gracias Brihuega!!